104 / ENE-ABR 2022

Empleo e ingresos

EDICIÓN 104 ENE-ABR 2022

Por Jorge Iván González

El empleo es un bien intrínseco

El ingreso es una condición necesaria pero no es suficiente para alcanzar la buena vida. Esta afirmación está inspirada en la siguiente frase de La República de Platón:

En cuanto a los ricos, que llevan gravosamente la vejez, les viene como anillo al dedo este razonamiento, porque ni el hombre virtuoso soportaría fácilmente la vejez en medio de la pobreza, ni el no virtuoso, cargado de riquezas llegaría a encontrar satisfacción en ellas.

La virtuosidad permite que la riqueza sea aprovechada de manera adecuada. Esta reflexión se puede hacer extensiva a los países. Es frecuente que los gobiernos sean incapaces de sembrar las bonanzas. El ejemplo más dramático es el de Venezuela. Obviamente, sin llegar a esos extremos, Colombia no ha sabido aprovechar los excedentes derivados de las bonanzas de petróleo y minerales. Durante las dos administraciones del presidente Santos, no se logró que estos nuevos recursos tuvieran un impacto positivo en el desarrollo de la industria y la agricultura nacionales. En estos años, las importaciones de alimentos básicos pasaron de 1 a 15 millones de toneladas de alimentos básicos.

La capacidad importadora, derivada de la abundancia de dólares, afectó, de manera negativa, la inversión y el empleo. Así que desde el punto de vista estratégico, un mejoramiento del empleo, únicamente es posible si se transforma la estructura productiva, y se dinamiza el mercado interno. Esta es la conclusión principal de la Misión Alternativa de Empleo1MISION ALTERNATIVA DE EMPLEO E INGRESOS., 2021. Propuestas para un Colombia Incluyente, ENS, Bogotá..

En las sociedades contemporáneas el empleo no es la única manera de obtener ingresos. Existen otras vías como las rentas (financieras, inmobiliarias, etc.) y los subsidios. Pero entre estas modalidades, el empleo es el mecanismo privilegiado.

Foto: Bogotá Cómo Vamos

Además de ser un medio para conseguir ingresos, el empleo tiene otras dos virtudes. Por un lado, es el eje de la actividad económica, ya que sin trabajo no hay producción. Y sin empleo no hay demanda. Y, por otro lado, el solo hecho de estar empleado es intrínsecamente satisfactorio. Este principio se cumple, por lo menos, en los oficios que no son desagradables.

No obstante la relevancia del empleo, el Estado colombiano ha dejado de lado el diseño de políticas públicas que, efectivamente, lleven a un aumento de la ocupación. De manera equivocada, se ha confiado en que la empresa privada logrará reducir el desempleo. Esta percepción desconoce el papel de liderazgo que debe cumplir el Estado.

El desempleo continúa siendo alto

El DANE acaba de anunciar la tasa de desempleo de enero de 2022. Tal y como se observa en la figura, este nivel es alto, comparado con las tasas anteriores a la pandemia, que oscilaban alrededor del 10%.

Fuente: DANE

Estos días ha sido claro que el aumento del PIB no lleva, de manera directa, a una intensificación del empleo. En el último trimestre de 2021, el PIB aumentó, con respecto al año 2020, en un 10,8%.

Este mayor crecimiento no se ha reflejado en el empleo porque: i) La dinámica del PIB apenas es un rebote, y no es el resultado de factores estructurales, como serían la ampliación de la capacidad industrial, de servicios y agropecuaria. ii) Una parte del aumento del PIB se explica porque sectores como el petrolero, las flores, etc., resultaron favorecidos con el alza de los precios internacionales. Estas dinámicas generan muy poco empleo. iii) Después de la pandemia, las empresas quieren mejorar su eficiencia interna, y están tratando de evitar la contratación de nuevos trabajadores. iv) La insatisfacción con el oficio que la persona desempeñaba antes de la pandemia, genera que ahora, después de la pandemia, el trabajador ya no quiera volver a hacer lo mismo. Este fenómeno se ha estudiado bien en Estados Unidos. En Colombia falta indagar más por las motivaciones del trabajador.

La pobreza aumentó

El cuadro muestra la incidencia de la pobreza entre 2012 y 2020. El hecho más notorio es el aumento entre el 2019 y el 2020.

– Rural disperso (en todos los cuadros siguientes) incluye centros poblados y rural disperso.
– El valor de la línea de pobreza depende del domino, pero a nivel nacional es $331.688 persona
mes. Y en Bogotá de $455.030 persona mes. En la zona rural es $199.828 persona mes.
Fuente: DANE

Aún antes de la pandemia, ya era notorio el aumento de la pobreza, tanto a nivel nacional, como en Bogotá.

En el país, entre 2018 y 2019, la pobreza pasó de 34,7% a 35,7%. Y en el 2020 aumentó a 42,5%. Ello
significa que entre 2019 y 2020 el número de personas pobres aumentó de 17,4 a 21 millones. En un año el aumento fue de 3,5 millones.

Las series muestran que la tendencia decreciente de la pobreza se frenó. En Bogotá, por ejemplo, el porcentaje más bajo se presentó en el 2014 (23,3%), y a partir de allí, la incidencia de la pobreza ha subido. La tendencia al alza se acentúo entre el 2019 y 2020. En este año la incidencia pasó de 27,2% en el 2019 a 40,1% en el 2020. En términos absolutos, el número de personas pobres aumentó en 1,1 millones. En total, pasó de 2,2 a 3,3 millones.

Entre 2019 y 2020 el número de personas pobres aumentó de 17,4 a 21 millones. En un año el aumento fue de 3,5 millones.

La pobreza extrema, que es la frontera del hambre, también aumentó. A nivel nacional, pasó de
9,6% en el 2019 a 15,1% en el 2020. Es pertinente la advertencia que hacen la FAO y otros2FAO Naciones Unidas; Unicef; Fida; WFP, y OMS, 2021. El Estado de la Seguridad Alimentaria y la Nutrición en el Mundo. Transformación de los Sistemas Alimentarios en Aras de la Seguridad Alimentaria, una Nutrición Mejorada y Dietas Asequibles y Saludables para Todos, FAO, Unicef, Jlfia, WFP, OMS, Roma., sobre la necesidad de cuidar la seguridad alimentaria.

El ingreso cayó

La caída de la producción y el mayor desempleo se reflejó en una disminución del ingreso de las familias. El cuadro 1 pone en evidencia la caída que tuvo el ingreso per cápita mes de la unidad de gasto entre el 2019 y el 2020. En Bogotá se redujo de $1,2 a $1 millón. Y a nivel nacional de $705 a $631,8 miles.

Fuente: Dane

Los menores ingresos se reflejan en un aumento de la pobreza porque la política pública a través de los subsidios, no logra compensar la caída en la capacidad adquisitiva de los hogares.

En contra de la percepción del gobierno y de la OCDE3OCDE, 2022. Estudios Económicos de la Ocde. Colombia, Ocde, Paris., la economía va mal. Los hechos son contundentes.

Ahora comienza una nueva bonanza petrolera, y el país no ha creado los mecanismos que le permitan manejar estos nuevos excedentes con virtuosidad, como diría Platón.

Foto portada: Alcaldía Mayor de Bogotá

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Filósofo de la Universidad Javeriana, magíster en economía de la Universidad de los Andes y doctor en economía de la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica. Profesor de las universidades Nacional y Externado. Exdecano de la Facultad de Ciencias Económicas y exdirector del Centro de Investigaciones para el Desarrollo (CID) de la Unal.

jorgeivangonzalez29@gmail.com

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